El Proyecto SABANA se muestra como un avance en la biotecnología de microalgas en España y nace como Programa de Investigación e Innovación Horizonte 2020 de la Unión Europea, financiado por esta y con una duración prevista inicial de 2016 a 2021. Posteriormente, el Proyecto sigue su curso como base para conseguir diferentes objetivos según el interés de las empresas que así lo consideren.

El nombre el proyecto es Biorrefinería Sostenible de Algas para Agricultura y Acuicultura (SABANA) y tiene como objetivo desarrollar una biorrefinería integrada a gran escala basada en microalgas.

El Proyecto SABANA y la sostenibilidad e impacto socioeconómico.

¿Qué hace que el Proyecto SABANA sea tan especial? Pues que contempla objetivos desde varios prismas. Uno de ellos es la sostenibilidad. El proyecto se centra en la utilización de agua de mar y nutrientes de aguas residuales para la producción de bioproductos, minimizando el consumo de energía y promoviendo un enfoque circular.

Otro es el conseguir bioproductos de alto valor. SABANA tiene como objetivo producir una gama de bioproductos valiosos, incluyendo bioestimulantes, biopesticidas, aditivos para piensos, biofertilizantes y piensos para acuicultura. Estos productos tienen el potencial de transformar las industrias agrícolas y acuícolas, haciéndolas más sostenibles y rentables.

E incidir en el impacto socioeconómico, porque se espera que SABANA genere importantes beneficios socioeconómicos, creando nuevos empleos y oportunidades de negocio en las zonas rurales de España, además de contribuir a la seguridad alimentaria y a la reducción del impacto ambiental de la agricultura y la acuicultura.

Cooperantes del proyecto SABANA.

Entre los cooperantes del proyecto SABANA se encuentran las empresas y entidades españolas como la Universidad de Almería, Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, FCC Aqualia SA y Biorizon Biotech S.L.

Y a nivel del resto de Europa, Mikrobiologicky USTAV – AVCR, V.V.I., GEA Westfalia Separator Group GMBH, Universita Degli Studi di Milano, Szechenyi istvan university, karlsruher institut fuer technologie, A.I.A. S.p.A. y
CIB-Consorzio Italiano Biogas E Gassificazione.

Como Acción de Innovación, durante esta primera fase de unos cuatro años, se ha llevado a cabo actividades de investigación e innovación, así como la construcción de una instalación de demostración para producir biofertilizantes-biopesticidas y alimentos acuícolas a escala de 5 hectáreas. Con ella SABANA, tiene como objetivo desarrollar una biorrefinería integrada a gran escala basada en microalgas para la producción de bioestimulantes, biopesticidas y aditivos para piensos, además de biofertilizantes y alimentos acuícolas, utilizando únicamente agua marina y nutrientes de aguas residuales (aguas residuales, concentrados y estiércol de cerdo).

Biofactoría de microalgas en España.

Derivado del proyecto, en 2024 se ha inaugurado en Mérida una de las mayores biofactorías de microalgas de Europa, construida en la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Mérida.

Aqualia lidera el proyecto SABANA, al que pertenece esta instalación, y que tiene como principal objetivo la obtención de bioproductos a partir de aguas residuales. Ha supuesto una inversión de 11 millones de euros procedentes de Fondos Europeos y 1,5 millones aportados por Aqualia, la empresa concesionaria del Servicio Municipal de Aguas en la ciudad.

En este contexto, y como exponente claro de sus posibilidades, H2020 SABANA, convierte a la EDAR de Mérida en una biofactoría a escala real, y la presenta como un claro ejemplo de economía circular aplicado a escala industrial.

La biofactoría se ha construido un área de tratamiento de cerca de 20.000 metros cuadrados, donde se han instalado los denominados “raceway” – un carrusel de agua abierto con poca profundidad donde se cultivan las microalgas – y que dotan una capacidad de tratamiento de alrededor de 2 millones de litros de aguas residuales al día, y una producción de biomasa de alto valor cercana a las 200 toneladas anuales.