En el área de los bioestimulantes bacterianos utilizados en agricultura, se encuentra la bacteria Priestia megaterium, anteriormente conocida como Bacillus megaterium y a la que ya hemos tratado en Bioestimulantesagricolas.net.
La reclasificación del género se basa en estudios filogenéticos recientes que han llevado a una mejor comprensión de sus relaciones taxonómicas. Por lo tanto, esta especie, al haber sido recientemente transferida al género Priestia, en vez de Bacillus megaterium, su nomenclatura correcta es Priestia megaterium.
Al estar ante el mismo microorganismo, la Priestia megaterium es una de las bacterias más grandes no patógenas, con dimensiones que varían de 2 a 5 µm de largo y 1.5 µm de ancho. Las células son bacilares (en forma de bastón), rectas o ligeramente curvas, y suelen agruparse en cadenas cortas. Es grampositiva, lo que indica una pared celular compuesta por una capa gruesa de peptidoglicano.
En cuanto a su metabolismo, la Priestia megaterium es un organismo aerobio facultativo, lo que significa que puede crecer en presencia o ausencia de oxígeno. Posee un metabolismo versátil que le permite utilizar una amplia variedad de sustratos como fuentes de carbono y energía. Esta versatilidad es aprovechada en diversas aplicaciones industriales.
Aplicaciones biotecnológicas de la Priestia megaterium.
En cuanto a las aplicaciones biotecnológicas de la Priestia megaterium, en relación con su capacidad de producción de enzimas, es una fuente importante de enzimas industriales, tales como amilasas, proteasas y celulasas. Estas enzimas son utilizadas en la producción de detergentes, procesamiento de alimentos y fabricación de biocombustibles, biofertilizantes y bioestimulantes para las plantas.
En la síntesis de biopolímeros, la bacteria es capaz de sintetizar polihidroxialcanoatos (PHA), biopolímeros que son biodegradables y representan una alternativa sostenible a los plásticos derivados del petróleo.
Y en biorremediación, proceso biotecnológico que utilizan ciertos microorganismos, hongos, plantas o las enzimas derivadas de ellos para recuperar un medio ambiente alterado por contaminantes a su condición natural, la Priestia megaterium ha mostrado potencial en suelos y aguas contaminadas, gracias a su capacidad para degradar compuestos tóxicos y metales pesados.
Uso de Priestia megaterium como bioestimulante agrícola.
La Priestia megaterium, como hemos avanzado, anteriormente conocida como Bacillus megaterium, es una bacteria que ha mostrado un gran potencial como bioestimulante agrícola debido a sus múltiples beneficios agronómicos. Esta bacteria puede mejorar la disponibilidad de nutrientes, promover el crecimiento de las plantas y protegerlas contra patógenos.
Entre sus beneficios se encuentra su capacidad de solubilizar el fósforo insoluble del suelo mediante la producción de ácidos orgánicos, como el ácido láctico, ácido acético y ácido cítrico. Estos ácidos convierten el fósforo ligado a compuestos minerales en formas solubles que las plantas pueden absorber.
Mediante su producción de fitohormonas como auxinas, citoquininas y giberelinas, estimula la elongación de raíces y brotes, mejorando el vigor general de las plantas; además contribuye a la mejora la capacidad de las plantas para resistir condiciones de estrés abiótico, como sequía y salinidad.
Aunque no es un fijador de nitrógeno independiente, la Priestia megaterium puede asociarse con otras bacterias fijadoras de nitrógeno, mejorando la disponibilidad de este nutriente esencial, reduciendo la necesidad de fertilizantes nitrogenados químicos.
Por otra parte, al producir enzimas y metabolitos secundarios, estos tienen actividad antimicrobiana e inhiben, en mayor o menor medida, el crecimiento de patógenos del suelo. Así, tiene acción en biocontrol al reducir la incidencia de enfermedades causadas por hongos y bacterias patógenas, mejorando la salud y el rendimiento de los cultivos.
Y sobre en cuanto a su participación en la mejora de la calidad del suelo, su producción de exopolisacáridos y otros compuestos orgánicos mejoran la estructura del suelo al aumentar su capacidad de retención de agua y nutrientes.
Por todo ello, la Priestia megaterium ofrece una amplia gama de beneficios agronómicos como bioestimulante agrícola y se ha integrado con éxito en programas de manejo integrado de cultivos (MIC), combinándose con otras prácticas sostenibles.
Imagen de wikipedia. Priestia megaterium teñido con Gram